26 de febrero de 2013
23 de febrero de 2013
Crónicas de un Caótico-Neutral
13 de febrero de 2013
Hibari no Shitashi - Capítulo 2
Shitaro:
10 de febrero de 2013
Cocina Moderna
Caldo de carne con arroz y con durazno.Ingredientes:Fuego :1Agua :1Recipiente :1Arroz :1Carne :2Durazno :media lataPólvora negra :a gustoInstrucciones:Soldado raso Misha Orlov y yo haciendo rondas habituales en: Calle 23, Calle 24, Calle 27 de: Sector 6. Cuando oímos ruido en almacén de Calle 23. Entramos a almacén. Encontramos: niños (2), cadáver de Oscuro (1), caja de arroz (1), latas vacías (2), lata de duraznos a medio ingerir (1), residuos de tungsteno (29).Seguimos protocolo: abrimos fuego sobre niños. Niño 1: muerto. Niño 2: logró herir gravemente a Misha y escapó por ventana. Misha pierde mucha sangre de cuello y pierna. Detenemos sangrado y decapitamos cadáver de Oscuro antes de reanimarse. Celebramos victoria (¡Eterna vida a Protector!). Cocinamos comida.
- Hacer fuego pequeño. No revelar posición a enemigo.
- Usar casco de combate como recipiente. Llenar con agua y poner sobre fuego pequeño.
- Poner arroz de caja en casco.
- Cortar dos carne de niño y poner en casco.
- Revolver hasta hervir.
- Servir en latas vacías.
- Agregar duraznos a latas. Más proteína y decoración.
- Condimentar con pólvora negra para mejorar sabor.
- Comer.
- Agradecer a Protector: ¡Eterna vida a Protector! ¡Eterna prosperidad a República!
7 de febrero de 2013
Hibari no Shitashi - Capítulo 1
5 de febrero de 2013
Relodeando
Estoy aquí -junto a un equipo de expertos en las más diversas áreas del conocimiento humano- intentando reinyectarle vida a este nunca bien ponderado blog. Tras años de abandono, tan solo loguear me dio trabajo. Tuve que hackear la matrix (se sigue usando esa metáfora, ¿no?) para poder recuperar mi propio password.
Ahh hijo de mis dedos, carne de mi mente; engendro amorfo de tez blanca e interface siempre variable: ¿podrás algún día perdonar mi ausencia?
Deberías, desagradecido, porque así como te di vida, ¡puedo darte muerte!
Bah, sabés que no puedo borrarte. Cosita hermosa. Voy a tratar de desempolvarte un poco, darte una manito de pintura quizás, hacer algunos ajustes y enchularte la máquina (se sigue usando esa metáfora, ¿no?) para que quedés lindo y acorde a los usos y necesidades de los consumidores 3.0.
Poets & Madmen 3.0: y que sea lo que Dios quiera.
5 de mayo de 2010
Luz
No estoy acá. Yo sé que no estoy acá. No quiero estar acá. Pero no necesito querer no estar acá. Porque no estoy acá. Sigo en el hospital y nada de esto es real. No lo estoy viendo. No lo estoy sintiendo. Es mi cerebro que se está cerrando. Está reacomodándose. Está recreando lo que espero sentir en este momento. Pero no es más que eso. Esto no existe. No hay luz. No hay una aterradora sensación de paz. No estoy flotando ni viéndome a mí mismo. Sé dónde estoy. Sigo en el hospital. Sigo siendo yo.
Sé lo que es esto. Lo leí. Es mi cerebro que se está cerrando. Es la falta de oxígeno. Es la glándula pineal descargando hormonas. Sigo siendo yo y esta luz no existe. No voy a entregarme a una ilusión. No quiero volver a verlos. Ustedes no existen. Ya no existen. No estás ahí. Aunque te vea de nuevo. Aunque estés despeinada y quiera peinarte. O vayamos hasta el río paseando en bicicleta. O el cielo esté naranja. O te esté besando durante toda nuestra vida. O te me vayas de nuevo, entre mis manos, mientras tu cerebro se cerraba.
No estamos llorando. No estamos acá. Sigo en el hospital. Sigo allá abajo. Aunque no quiera estar ahí acostado. Aunque quiera estar acá con vos. Bajo el cielo naranja. Así abrazados. Y sentir de nuevo tu olor. Y peinarte con los dedos como entonces. Y pedirte que ya no llores. Y prometerte esta vez no dejarte ir.